La sexualidad es una parte de la salud integral y la personalidad de todo ser humano, para nuestro pleno desarrollo tanto físico como emocional tenemos la necesidad de deseo de contacto, de intimidad, placer y amor. Conocerse a uno mismo puede explicar muchos de los cambios que se producen en nuestro organismo y puede ayudar a tomar nuestras propias decisiones para disfrutar de nuestra sexualidad.
Hoy en día es muy importante la educación sexual para dar a conocer a los jóvenes una capacidad de comunicación, términos de valores, relaciones sanas, basadas en el respeto, es decir, fomentar las conductas positivas y dejar a un lado las negativas, como por ejemplo la discriminación o la violencia de género, ya que actualmente se produce una visión borrosa de lo que es el sexo. Una correcta educación de la sexualidad proporciona la prevención de enfermedades desde un punto de vista positivo, poniendo de relieve aspectos como la igualdad, la empatía, la responsabilidad, para evitar por ejemplo embarazos no deseados, y la reciprocidad, así todo esto lleva a un buen estado de bienestar y salud tanto personal como social.
Una parte de la salud sexual, es la reproductora, es decir, la capacidad de ser padres con la procreación de hijos cuando la pareja se encuentre en una de sus mejores etapas para mantener un entorno adecuado, pero no podemos olvidara la capacidad del ser humano para disfrutar de la vida sexual sin riesgos de procrear. Por otro lado tenemos que tener en cuenta que la prevención, mediante por ejemplo preservativos, es vital para evitar contraer enfermedades que ponen en riesgo tu salud, y en cierto modo, para controlar la natalidad.
Por último hay que mostrar que si alguien decide tomar una vida sin prácticas sexuales puede haber enfermedades que sean irreversibles, ya que es parte de nuestro desarrollo cognitivo
En la siguiente infografía podemos apreciar más información de la sexualidad masculina de un modo resumido.
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